sábado, 14 de noviembre de 2009

MOMI

No son las siglas de algún museo nuevo, ni de un fármaco milagroso (aunque ya podía ser así), es el nombre de una amiga que nos ha dejado.

Hace dos días que no estás con nosotros y las lágrimas se extienden y multiplican. Semanas atrás empezamos a hablar con nuestra hija para que no le pillara demasiado por sorpresa, y hoy, por fin hemos encontrado el momento ¿adecuado? Te puedes imaginar, con lo que te quiere, las preguntas se sucedían tratando de justificar lo que no se puede, hasta que ha roto a llorar. Era mejor así que esperar a que no te encontrara en la casa de enfrente... no es la primera vez que la casa de enfrente nos hace llorar. Me está doliendo escribir tratando de que las lágrimas no estropeen el teclado.

Fuiste puritíta energía (lo seguirás siendo en nuestro corazón); nos traías y llevabas a tu antojo por todas partes. Ahora a la huerta de Martín, luego al mercadillo de Calalberche y a medio día, con ese acento de La Línea que, después de vivir primero en Alemania y más de veinte años en Villa, conservabas prácticamente inmaculado nos decías: "...y ahora venirse a la casa a hacer una barbacoa".

Tu casa era la de toda la gente, y tus hijas y Javier siempre ponían la mejor de sus caras para recibirnos a todos. Y ahora, como mandan tus creencias, estas en la casa de todos. Con tu mueca de serenidad nos estabas diciendo que estas bien...

Quince días hace que te fui a ver y quedamos en bailar juntos en las fiestas del año que viene; tú recuperada y yo con mi espalda nueva íbamos a ser centro de miradas de alegría:
- Mira la Momi que bien está.
- Está tan guapa como el día de la boda de Vanesa.
- Y Edu... fíjate, si parece más alto. ¡Jajaja!
- Pues Javier y Alicia tampoco bailan mal.
La escena es contemplada por Noelia, Andrea, Vanesa y Ángel, que también bailan. Más a lo lejos, en un extremo de la plaza están Montse, Martín, Mari y todos los que te quieren. La tengo grabada; pasará en septiembre después de la pólvora...

Esta mañana, después de las primeras lágrimas, pensábamos en qué te convertirás y llegamos a la certeza de que serás una flor, que con ese arte que tienes para las plantas te irás extendiendo por nuestros jardines, macetas y campos y viviremos algo más felices sabiendo que el mundo se está poblando de Momi.

Este año se cumplió el centenario de la muerte del Indio Jerónimo, otro luchador, y curiosidad... murió con la misma edad que tú, pero dando la vuelta a los números. Eres tan joven...

1 comentario:

PEDROHUELVA dijo...

tantas gentes valiosas se van